martes, 19 de enero de 2016

¿El tiempo conspira contra ti o eres tú quién conspira contra el? Parte I



Hay un tiempo para todo, tiempo de reír, tiempo de llorar, tiempo de abrazar y aun abstenerse de abrazar señalo el sabio Salomón, pero ¿cómo distinguimos los tiempos?, ¿cómo podríamos aprovechar al máximo este recurso que se nos ha dado?, el tiempo pasa y no vuelve, no es aprovechado simplemente por tener una agenda copada, sino por estar invirtiendo en la visión y misión que cada uno guarda para alcanzar. No les resulta curioso que ese mismo tiempo de 24 horas por día que se nos ha dado para administrar, es el mismo que tienen Asiáticos, Africanos, Latinos, Norte Americanos y Europeos, aunque algunos al parecer les rinde más que a otros y que dentro de este contexto también a unos les parece que juega en contra de ellos, mientras que otros juegan con él, surge la búsqueda de buscar respuestas a esta interrogante del título.

Indicativos que nos permiten reflexionar:

Les compartiré causas de esos efectos en que nos hemos fijado en determinados
momentos, sin deseo de comparar despiadadamente, más bien les invito a tomar lo bueno de las ejemplificaciones a razón de concluir acerca de la temática actual. Se han fijado que muchos de los productos de línea blanca, línea marrón, juguetes, equipos telefónicos, entre otros son de origen asiático, lo cual resulta interesante, pues nuestra postura ha sido la de tener una concepción de respeto y reverencia al coeficiente intelectual, y las destrezas de un Chino o al de un Japonés, sin meditar de donde deriva su éxito. Bien me permitiré compartirles lo que respecto a esto comento Yokoi Kenji de raíces japonés pero de nacionalidad Colombiana y este chico pudo comparar el por qué un Japonés es bueno en lo que hace, literalmente este hombre afirma ¡inteligente un colombiano, un latino; pero disciplinado un Japonés! allí radican las diferencias, disciplina Vs inteligencia. Lo cual me recuerda a una frase que me comento un amigo, quizás la copió, pero la grabé: “mientras tu duermes hay un asiático practicando, mejorando lo que sabe hacer”. Particularmente al mirar el video de una niña de seis años tocar la guitarra con tal destreza que verías a una niña maravilla frente a ti, tras mi asombro exprese: “caramba no tiene oficio”, pero creo que mi término fue equivocado, ella tomo muy, pero muy enserio su oficio.

En la película de Tom Cruise “El ultimo Samuray” parafrasearé una de sus líneas: “Una de las cosas que ha llamado mi atención es ver la disciplina de estas personas, practican y practican  para mejorar su técnica”, sinceramente querido lector esto me llevo a meditar acerca de su búsqueda de perfeccionar lo que hacen y concluí que definitivamente es que es un fuerte de su cultura, a lo cual le guardan mucha reverencia, esto es uno de sus valores familiares, y si lo vemos bien también ha sido uno de los valores que se nos ha querido transmitir, “la Disciplina”, lo cual asocio con una palabra “HABITOS”, Pero ninguno de estos se permitiría sin la herramienta del tiempo, el Buen uso del tiempo.

¿Cómo Aprovecho el tiempo?



El aprovechamiento del recurso tiempo tiene mucho que ver con la manera en que lo invertimos, y esto conjuga una serie de cosas que debemos tener presente como mi visión y misión de vida, lo que debo hacer para mantenerme caminando en pro de ese logro, que en consecuencia trae satisfacción. Si somos distraídos, permitimos que los roba tiempo hagan boga de nuestras actividades diarias trayendo consecuencias negativas, así que  es necesario incorporar en nuestro estilo de vida modelos que nos permitan avanzar, es necesario tener aliados que nos ayuden a conseguir la conquista de nuestros objetivos y estos son hábitos que enriquecen el carácter,   disciplina que fija y Perseverancia que nos lleva a la meta.

Así que la segunda parte hablaremos de dos cosas fundamentales como crear  hábitos positivos, y herramientas para administrar el tiempo identificando los roba tiempos. 



Eclesiastes 3:1 - 8 
1Todo tiene su momento oportuno; hay un tiempo para todo lo que se hace bajo el cielo:

un tiempo para nacer,

    y un tiempo para morir;
un tiempo para plantar,
    y un tiempo para cosechar;

un tiempo para matar,

    y un tiempo para sanar;
un tiempo para destruir,
    y un tiempo para construir;

un tiempo para llorar,

    y un tiempo para reír;
un tiempo para estar de luto,
    y un tiempo para saltar de gusto;

un tiempo para esparcir piedras,

    y un tiempo para recogerlas;
un tiempo para abrazarse,
    y un tiempo para despedirse;

un tiempo para intentar,

    y un tiempo para desistir;
un tiempo para guardar,
    y un tiempo para desechar;

un tiempo para rasgar,

    y un tiempo para coser;
un tiempo para callar,
    y un tiempo para hablar;

un tiempo para amar,

    y un tiempo para odiar;
un tiempo para la guerra,
    y un tiempo para la paz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Disqus Shortname

Comments system